En el allanamiento a la casa del ex presidente Pedro Pablo Kuczynski, la fiscalía incautó una serie de documentos que probaría una coordinación entre el entonces mandatario de la República y el congresista Kenji Fujimori para otorgar el indulto presidencial al dictador Alberto Fujimori.
En total, según fuentes judiciales, se trataría de doce documentos incautados el 24 de marzo que incluyen tarjetas personales, documentos oficiales, una carta de Kenji Fujimori y discursos del presidente, con anotaciones manuscritas por él mismo, al margen.
El Equipo Especial del Ministerio Público, para el caso Lava Jato en el Perú, ha pedido al Juzgado de Investigación Preparatoria Nacional Anticorrupción convalidar la incautación de estos documentos, con el fin de realizar la investigación respectiva.
La fiscalía hace este pedido porque el allanamiento era para buscar documentos sobre los vínculos de PPK con la constructora brasileña Odebrecht.
Uno de los documentos que llama la atención de la fiscalía es una tarjeta personal del empresario Álvaro Bedoya Delboy, hijo de Álvaro Bedoya Dubois, uno de los que financia el alquiler de la casa donde vive actualmente Fujimori.
En la tarjeta, además del teléfono de Álvaro Bedoya, se anotó el número de celular de Kenji Fujimori. También se encontraron dos cartas sobre el indulto. Una suscrita por un tal “Álvaro”, con fecha 28 de junio del 2017, y otra de Kenji Fujimori, fechada el 2 julio del 2017.
En la copia impresa de lo que sería el discurso de PPK sobre el indulto a Fujimori , también se anotó el nombre de Álvaro y los números de celular de diversos congresistas. La fiscalía recién pide la convalidación de estos documentos porque estaban lacrados y fueron analizados el 18 de abril.
Por otro lado, desde el Congreso, el proceso que concluiría en el desafuero de Kenji Fujimori sigue su marcha. Se le acusa de una supuesta compra de votos para evitar la vacancia de Kuczynski, meses después de haber conseguido el indulto para su padre.
Bienvenido Ramírez, uno de los congresistas denunciados junto a Kenji, denunció que la acusación “fue un complot de Moisés Mamani, Carlos Ticlla y Modesto Figueroa”, de Fuerza Popular.
El legislador aseguró que sus colegas le realizaron preguntas direccionadas y luego habrían editado la grabación.
El congresista Bienvenido Ramírez exhortó al Ministerio Público a incautar el reloj que, según él, utilizó Modesto Figueroa para grabarlo sin que se diera cuenta.
“Estoy seguro de que a mí me grabó Figueroa. La Fiscalía debe actuar en este caso”, dijo en diálogo.
Hasta el momento, la Fiscalía solo tiene el reloj que usó Mamani para grabar las conversaciones con Ramírez, Kenji Fujimori y Guillermo Bocángel.
“Las conversaciones fueron grabadas con varias cámaras espías. Eso dice el informe que he presentado ante la Subcomisión de Acusaciones Constitucionales. Un perito ha determinado que fue así y que se editaron las grabaciones”.
Fuente: Andina
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