Alan García respondió en la fiscalía en calidad de testigo por la venta del aeródromo de Collique. Tras cuatros horas de interrogatorio, abandonó la sede del Ministerio Público y descartó cualquier irregularidad en este caso.
“En su desesperación por encontrarme algo no me encuentran cosas porque yo no nací para ladrón, como algunos, sino para la gloria de poder conducir a nuestra patria a un camino mejor”, señaló.
Señaló en otro momento que “nunca” habrá alguien que lo vincule con la recepción de dinero ilícito, como en otros casos donde “a otros los agarraron con US$20 millones o con US$3 millones y agendas”.
Así, García Pérez hizo alusión al presunto sobornos que recibió Alejandro Toledo y por el presunto aporte que recibió el Partido Nacionalista, de Ollanta Humala, para sus campañas electorales.
“Nadie nunca ha dicho, ni podrá decir porque no hay nada, que yo tengo que ver con algo de dinero (…) Hay la obsesión de que García puede querer hacer algo en política o influir en política. Hay que criminalizarlo, hay que liquidarlo, como si las cosas fueran muy bien cuando me criminalizan, según se ve no van muy bien”, acotó.
Respecto al Caso Odebrecht, vale precisar que funcionarios de su segunda gestión son vinculados directamente con la recepción de sobornos por la Línea 1 del Metro de Lima. Asimismo, el propio líder aprista es parte de una investigación preliminar por este caso.
Fuente: Perú21
Comentarios