Óscar Valdés, respondió a las críticas a su designación y señaló, tras asumir el cargo, que el nuevo equipo ministerial “no se ha militarizado”, sino que busca ser más eficiente y llevar un mensaje de concertación.
Descartó que el gobierno de Ollanta Humala vaya a tener un “giro autoritario” por haber nombrado a un militar en el premierato, y descartó que se vaya a privilegiar la represión para combatir las protestas sociales.
“No soy autoritario, como me pintan, y eso se lo pueden demostrar las 12 regiones donde he conducido audiencias de seguridad ciudadana. Lamento que me quieran hacer parecer como autoritario; me gusta la disciplina y que las personas tengan palabra, y la disciplina no es potestad sólo de los militares”, explicó tras remarcar que los únicos militares en el gobierno son el jefe de Estado y él.
El Premier comentó que el gobierno ha recibido un país “embalsado en muchos conflictos, pueblos que no han sido atendidos y hoy quieren hablar al mismo tiempo. El gobierno ha demostrado agregó que hemos atendido hasta cuatro conflictos por semana y nos hemos acercado a las provincias”.
En ese sentido, señaló que el proyecto minero Conga pasará por un “peritaje internacional” para aclarar las dudas del pueblo cajamarquino y determinar si se ejecuta o no.
En otro momento, Valdés reconoció que el gabinete de Salomón Lerner tuvo problemas de coordinación y no logró un mensaje coherente. “Creo que en la amplitud de criterios, como se ha estado trabajando, y la libertad de acción que el Presidente dio a sus ministros. De alguna manera han habido algunos errores de falta de coordinación y de no tener un mensaje coherente. El gabinete tiene que ser un equipo muy afinado”, manifestó.
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