La Fiscalía buscará la detención del exsecretario de la presidencia Luis Nava Guibert y de su hijo José Antonio Nava Mendiola. El impedimento de salida del país ya no es suficiente.
El exgerente general de Transportes Don Reyna e hijo del exsecretario de la presidencia ya salió del Perú. Lo hizo el mismo día que se presentó un pedido al Poder Judicial para que se le prohibiera viajar al extranjero. Luis Nava podría hacer lo mismo. Podría viajar, pese a que se lo prohíban. Es decir, fugar. Es lo que temen y sospechan en la Fiscalía.
Es evidente que a los investigados les preocupa la contundencia de las pruebas presentadas por Odebrecht. La constructora brasileña informó y entregó a la Fiscalía documentos de los sistemas Drousys y MyWebDay que muestran que entre los años 2006 al 2008 la llamada Caja 2 de Odebrecht realizó diversos pagos a Luis Nava y a su hijo.
Los depósitos bancarios están relacionados con posibles actos de corrupción, pago de coimas en las obras del Metro de Lima e Interoceánica Sur. Con esas pruebas, el 10 de abril la Fiscalía solicitó al juez Carlos Sánchez Balbuena, del Segundo Juzgado Nacional de Investigación Preparatoria del Sistema Anticorrupción, el impedimento de salida del país para Luis y José Antonio Nava. La audiencia para evaluar dicho pedido fue convocada para el 15 abril. Los fiscales Rafael Vela y José Domingo Pérez llegaron al sistema anticorrupción para sustentar el pedido, pero la audiencia no se realizó. Nadie explicó los motivos de la suspensión. Solo se informó que se notificaría a los abogados oportunamente.
Según trascendió, la fiscal desistió de su pedido y evalúa solicitar la inmediata captura de Luis Nava Guibert y de su hijo. Horas después de frustrarse la audiencia, Luis Nava se internó en una clínica por una afección cardiaca, anunció su abogada Cynthia Yanelli.
“No nos han notificado nada, pero por lo que hemos podido tener conocimiento, el fiscal José Domingo Pérez se estaría desistiendo de su pedido de impedimento inicial y presentaría, si no lo ha hecho ya, un pedido de detención preliminar. Estamos preparados para eso”, declaró Yanelli.
Al comienzo de las investigaciones, en enero del 2017, el exsuperintendente de Odebrecht Jorge Barata reveló que pagaron 8,1 millones de dólares al exviceministro de comunicaciones, Jorge Cuba Hidalgo por los tramos 1 y 2 del Metro de Lima.
A mediados del año pasado, Cuba buscó acogerse a la colaboración con la Fiscalía, aunque luego se retractó y habló de generalidades. En esa primera declaración, Cuba dejó entrever que los acuerdos ilícitos venían de más arriba, en el gobierno de la época, es decir, del expresidente Alan García.
En varios momentos mencionó al expresidente Alan García y al secretario de la presidencia, Luis Nava.
“Ya Jorge Barata tenía un acuerdo con Alan García, porque ya era una política de Odebrecht pagar comisiones por las grandes obras que se adjudiquen ellos, y en este caso hablamos de una obra de más de 1,100 millones de dólares”, dijo.
Ahora, Odebrecht ha revelado que en los archivos del departamento de Operaciones Estructuradas han encontrado cuatro pagos realizados a José Antonio Nava Mendiola, bajo el sobre nombre “Bandido”, por 471,302 dólares, realizados entre enero y octubre del 2010. Los pagos a “Bandido” se realizaron con cargo a los ingresos de la construcción del Tren Eléctrico de Lima. Es la misma obra, por la que ya habían acordado un pago total de 8,1 millón de dólares a Cuba Hidalgo y otros funcionarios del Ministerio de Transportes y Comunicaciones.
En los archivos del Departamento de Operaciones Estructuradas se anotaron en la denominada “Caixa Libre Perú”. Esta es la caja chica que utilizaba Barata para realizar pagos ilícitos en efectivo en el Perú. De allí salió el dinero para que se realizaran los pagos al hijo del exsecretario de la presidencia.
Según las anotaciones, los pagos se habrían realizado en efectivo en Lima. La primera entrega, el 27 de enero del 2010, por 80 mil y la cuarta entrega el 18 de octubre del 2010, por 261,300 dólares. En todos los casos se anotó que eran pagos por el Metro de Lima.
Además, Odebrecht ha aclarado que los depósitos por 1.394.200 dólares que realizaron en la Banca Privada de Andorra, a la offshore Ammarin Investment INC del exdirector de PetroPerú, Miguel Atala Herrera, eran en realidad pagos a Luis José Nava Guibert, quien recibía el apelativo de “Chalán”. Es la primera vez, entre los casos reportados por Odebrecht, que un nombre código hace referencia al nombre de otro funcionario público. En este caso, nada más que al nombre del jefe inmediato y único de la persona a la que se hacen los pagos. Posiblemente, sospechan en la Fiscalía, un sobrenombre que, a la vez, cubre y deja constancia del verdadero receptor de los sobornos.
Pero a Nava no solo le realizaron pagos en la Banca Privada de Andorra. Hay otros 19 depósitos bancarios por 2.660,000 dólares que tuvieron como destino al secretario de la presidencia de la República, el funcionario público y compañero aprista más cercano al expresidente García.
Hay un pago realizado el 12 de diciembre del 2006 por 490,000 dólares, que se realiza a través de la offshore Comet Cargo & Courier INC. Esto es, 18 semanas después de que el expresidente García asumiera su segundo mandato como presidente de la República.
En la contabilidad de la Caja 2 de Odebrecht estos pagos se anotaron con cargo al proyecto vial Interoceánica Sur. Un proyecto por el que ya habían negociado un pago ilícito al expresidente Alejandro Toledo. En esa época, Luis Nava no tenía ningún cargo ejecutivo en el gobierno de García. Solo era el secretario de la presidencia.
Luis Nava negó haber recibido sobornos de Odebrecht. “Quiero decir a mis amigos, a mi familia, a los miembros del partido –que son gran mayoría–, que tengan la tranquilidad de que Luis Nava Guibert nunca ha hecho nada malo”, declaró. Agregó que está preocupado por la decisión inminente de la Fiscalía.
“Esas detenciones preventivas se prestan a abusos, a atropellos. Entonces, si me detienen, pues, aquí estoy”, aseguró. También amenazó demandar por difamación a IDL-Reporteros, pero este respondió publicando un documento donde Odebrecht, ratifica ante el Ministerio Público de Brasil que la denominación ‘Chalán’ corresponde a él y la de ‘Bandido’ a su hijo. El acuerdo de colaboración empieza así a rendir frutos.
Fuente: La República
Comentarios