Esta vez Alan Garcia opino sobre las pasadas elecciones municipales y negó la posibilidad de un fraude electoral, en medio de denuncias e inquietudes que rodean el lento y ajustado cómputo de la elección de la Alcaldesa de esta ciudad.
García reaccionó contra comentarios que consideran sospechoso el elevado número de actas electorales observadas -más de 20 por ciento- y a la demora de las cifras oficiales, aún pendientes a 48 horas de los comicios regionales y municipales del domingo último.
Pidió confiar en la Oficina Nacional de Procesos Electorales (ONPE) -que conduce el proceso- y el Jurado Nacional de Elecciones (JNE), que resuelve reclamos y sostuvo que ambas instancias son independientes.
“Es imposible un fraude porque todas las ánforas, todos los votos, todos los resultados y actas están allí”, expresó, ante las inquietudes expresadas por el grupo Fuerza Social, cuya candidata, Susana Villarán, logró un ajustado primer lugar, según tres encuestas y un conteo rápido (muestreo de actas electorales).
De acuerdo con García, Perú ya no vive la época en que se manipulaba y se alteraban los resultados desde el centro de cómputo, por lo que insistió en rechazar las versiones sobre un posible fraude.
El mandatario coincidió con los argumentos usados por dirigentes del conservador Partido Popular Cristiano (PPC) para defender el proceso de cómputo, en el que tiene el segundo lugar, por menos de uno por ciento, su candidata, Lourdes Flores.
Luis Galarreta y José Luis Rodríguez, parlamentario y personero del PPC, coincidieron también con García en que hay que esperar con paciencia los resultados finales, y acusaron al dirigente de Fuerza Social Eduardo Zegarra de presionar a la ONPE por haber este visitado ese organismo.
Zegarra se entrevistó con la jefa de ese organismo, Magdalena Chu, para indagar sobre las actas, y dijo haber quedado satisfecho con las explicaciones, mientras Susana Villarán dijo confiar en la ONPE.
Sin embargo, Fernando Villarán, hermano de la candidata, difundió por Internet un artículo en el que afirma que “el fraude esté en marcha” e involucra al gobierno -que tiene más afinidad con Flores- y a funcionarios del organismo electoral.
La vocera del Movimiento Nueva Izquierda, aliado de Fuerza Social, Ibis Fernández, manifestó preocupación por la demora de los resultados y las dudas que proyecta la situación sobre los comicios presidenciales del año próimo.
Señaló que la victoria de Villarán es irreversible, porque las actas impugnadas registran una amplia mayoría para ella y sólo tienen cuestionamientos formales.
Sin embargo, el conservador Galarreta dijo que las observaciones abarcan un millón 500 mil votos, aproximadamente, y su revisión puede modificar la tendencia actual, que favorece a Villarán.
El personero electoral de Fuerza Social, Manuel Velarde, declaró que tiene motivos para creer que el PPC y funcionarios de ONPE cometieron irregularidades, como dificultar la labor de los personeros de Villarán o negarles copias de las actas de votación.
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